Oscar Antonena va a ser único ganador cuando finalice el gobierno de Mariano Arcioni. Ha demostrado ser pícaro y de pocos escrúpulos para manejarse como pez en el agua en estas épocas turbulentas de la política. Sin ideología partidaria, sin votos, ni padrinos, fue conquistando los resortes de poder a base de acomodar el cuerpo en circunstancias inestables; en una gestión que cambiaba de ministros como de camisetas, él se mantuvo siempre firme, aliándose estratégicamente con miembros del gabinete que estaban más cercanos al gobernador y luego los desconocía si caían en desgracia. Con habilidad, traiciones y algunas bajezas consolidó su posición.
Cuando el licenciado Antonena, “cachito para los amigos”, asumió al frente del Ministerio de Economía colocó miles de millones en letras, muchas de ellas, en su amada Casa Puente, una empresa cercana al ministro que se decida a la gestión de capitales y que, según algunos mal intencionados, le dejarían numerosos dividendos (en los próximos días www.lavozdechubut.com publicará el detalle de las colocaciones).
En julio de 2020, en plena pandemia de Covid, se casó con Bruno Barria, su pareja de años, hecho bien recibido tanto por amigos como por enemigos. Poco tiempo después pudo conseguirle un trabajo en la provincia a su flamante esposo, quien realizaba tareas en el cementerio de Trelew. A Barria lo mandaron primera a la Agencia de Seguridad Vial, que dependía de Federico Massoni, y un tiempito después fue ascendido a la Dirección General de Rentas, donde percibe un haber mensual de $ 212.065.
Los trabajadores de Rentas están muy enfurecidos con el ministro y dicen cosas muy duras y tienen información documentada (que esta página publicará en detalle). Según cuentan el último gran negocio de Antonena, para cerrar el círculo virtuoso de su gestión, es el arreglo con la empresa KOLEKTOR, que en Chubut funcionaría como Karstek S.A, para se encargue del cobro de los impuestos provinciales.
Para Antonena el broche de oro a la fulgurante carrera sería hacerse del puesto de Administrador General del Superior Tribunal de Justicia, cargo que actualmente ostenta Héctor Capraro.
Para lograr ese objetivo, “Cachito” opera permanentemente a los miembros del Superior Tribunal y a través del propio Arcioni, quien presiona para que lo designen en ese cargo, que es un verdadero ministerio de economía judicial con sueldo de ministro del alto tribunal. Será el retiro perfecto de este verdadero guerrero de la política, que tantas veces estuvo en la trinchera.
Según algunos allegados, Antonena está muy esperanzado en una pronta resolución a su pase al Superior ya que Capraro estaría atravesando serios problemas de salud y el ministro sigue atentamente la evolución del funcionario judicial. “Ese cargo lo vengo negociando desde antes de asumir como Ministro de Economía, Capraro cada vez asiste menos por su delicado estado de salud, el último dato que tengo es que “el negro” hizo un tratamiento experimental y no funcionó”, le habría dicho a un amigo cercano.
Desde este portal no creemos que alguien de la capacidad de Antonena sea un carroñero de cargos, especulando con una grave enfermedad de un funcionario al que aspira reemplazar.
El camaleón
El paso de Antonena por la función pública se remonta a la gestión de Martín Buzzi, cuando fue nombrado como subsecretario de Coordinación Financiera en el ministerio que comandaba Gabriela Dufour y luego saltó al Banco del Chubut, con el cargo de vicepresidente, ya que su pliego para ocupar la presidencia nunca fue aprobado por la Legislatura.
Pasada la gobernación de Buzzi, se refugió en Camarones, donde fue asesor de la intendente Claudia Loyola y luego Secretario de Gobierno de esa municipalidad. Por ese entonces, comienzos de 2018, coqueteó con el Pro de la mano de Ignacio “Nacho” Torres, quien solía llevarlo a las reuniones de la Fundación Pensar, en Trelew.
Tiempo después, al no concretar un acuerdo con Torres, se arrimó a dirigentes de la UCR para que lo pusieran en la lista de candidatos a diputados en las últimas elecciones generales. Un auténtico camaleón de la política provincial.