El Fondo Monetario Internacional (FMI) presentó un nuevo informe global sobre la posición externa de los países tras la pandemia y allí señala que la de Argentina fue más débil que el nivel implícito en los fundamentals de mediano plazo y las políticas deseables.
La evaluación que llega tras el debut de Sergio Massa en el ministerio de Economía detalló elevadas vulnerabilidades de la deuda externa, las reservas internacionales precariamente bajas y la falta de acceso a los mercados internacionales de capital.
Si bien el FMI sostiene que los acuerdos de reestructuración de deuda en moneda extranjera con acreedores privados han brindado un importante alivio del flujo de efectivo a corto plazo, advierte que “sigue siendo fundamental implementar políticas que reconstruyan reservas internacionales y hacer frente a las obligaciones del servicio de la deuda externa a mediano plazo”.
El organismo es uno de los acreedores que espera cobrar a partir de 2026, para lo que el programa de Facilidades Extendidas apunta a que el país pueda volver al mercado de capitales para entonces.
Por otra parte, se proyecta un superávit de cuenta corriente cercano al 1 por ciento del PIB a mediano y largo plazo. Esto debería estar respaldado por una consolidación fiscal sostenida.
En las posibles respuestas políticas, el fondo enumera la reducción del déficit fiscal, combinada con políticas monetarias prudentes. “Es esencial para contener el crecimiento excesivo de la demanda interna, mantener un fuerte superávit comercial, reconstruir reservas internacionales, recuperar el acceso a los mercados y asegurar la sostenibilidad de la deuda, aunque este camino dependerá de la evolución de las condiciones globales”, enfatiza.
Por otra parte, agrega que “se requieren reformas estructurales para impulsar la capacidad exportadora de Argentina y fomentar la IED”. Y evalúa que a medida que se restablezcan la estabilidad y la confianza, se iniciará un proceso gradual basado en las condiciones. Será necesario considerar la flexibilización del cepo, agrega el organismo.
Tipo de cambio
De acuerdo con el análisis del FMI, se necesitan políticas fiscales y monetarias más estrictas para garantizar los superávits comerciales proyectados y mejorar la cobertura de reservas, lo que a su vez es esencial para allanar el camino para el acceso a los mercados y la relajación del cepo.
“Dada la escasez de reservas, las ventas de divisas (en el mercado oficial o paralelo) deben ser consistentes con las metas de acumulación de reservas, teniendo en cuenta la variabilidad proveniente de factores estacionales y episodios temporales de volatilidad excesiva”