miércoles, 4 de diciembre de 2024
Juan Martino en una cena en su hotel

 

Otro nombre vinculado a la hotelería de Trelew es el de Juan Martino, en calidad de inquilino. Sobre este comerciante genovés encontramos que en el año 1908 abrirá de nuevo el café, bar y billar, en la contigua casa perteneciente a Pascual Daleoso. Martino supo ganarse el afecto de los pobladores del Pueblo de Luis, y una demostración de este vínculo lo hayamos en una fiesta íntima, donde don Juan celebraba su cumpleaños. Concurrieron a la misma, varias personalidades de la ciudad. La fiesta transcurrió en el patio de su casa, y alrededor de un tradicional asado se congregaron muchos amigos, los que le desearon que los negocios del anfitrión fueran en aumento progresivo.

Además por medio de un aviso, nos informamos que este comerciante también contaba en su café con los rubros de confitería y pastelería; ofrecía realizar postres, ramilletes y masas por encargo. Los pedidos eran recibidos en su comercio con el denominado Café del Comercio. Este importante establecimiento, situado a una cuadra de la Estación del Ferrocarril, dispone de un grande y cómodo edificio que ofrece a sus viajeros, además de la excelente cocina, todas las condiciones de higiene y confort moderno.

También el periódico El Chubut del año 1908 publicita lo siguiente: “Se hace cualquier encargo del ramo: postres, ramilletes y masas en general. Los pedidos en el café de Juan Martino”.

En el mes de octubre de 1919 asumió como gobernador el Doctor Oreste Franzoni, quien ejercía la profesión de abogado en Trelew, en reemplazo del mandatario interino Dr. Rafael Robin Escalante. Franzoni estaba vinculado en Buenos Aires con el Dr. Roberto M. Ortiz (posteriormente presidente de la Nación en el período 1938-1942).

Llegó a bordo del vapor “Argentino” el 11 de octubre, a Puerto Madryn, y desde allí continuó viaje a Trelew donde centenares de personas lo esperaban para aclamarlo y darle la bienvenida en la estación del Ferrocarril. Esa noche se realizó un banquete de honor, por parte de la Sociedad Italiana a su vicepresidente, el gobernador del territorio Doctor Oreste Franzoni. La comida se sirvió en el Hotel Martino. El acto estuvo concurrido por lo más representativo de Trelew.

Al destaparse el champán hizo uso de la palabra John Howell Jones, presidente del Concejo Municipal local, quien se expresó en términos mesurados, haciendo votos por el buen gobierno del Dr. Franzoni.

Le respondió éste con un discurso en el que sintetizó sus propósitos de gobierno, asegurando que propendería en todo orden al incremento de las tres llaves primordiales del adelanto patagónico: Policía, Vialidad y Comunicaciones, y terminó haciendo público un mensaje que por su conducto les enviaba el presidente de la nación Don Hipólito Yrigoyen a los pobladores del Chubut, mensaje por medio del cual el supremo magistrado de la república le ofrecía el dedicado apoyo del gobierno central a este apartado girón de la patria Argentina.

Muchos y prolongados aplausos coronaron la disertación de Franzoni. Estos aplausos se irían desvaneciendo con el correr de los años, quedando en la memoria colectiva de los pobladores de la época, que el período que ocupó Franzoni fue catalogado como uno de los más corruptos, ya que varios de sus funcionarios fueron sentenciados y encarcelados.

En 1911, como un hombre trashumante, volvió a trasladar su comercio (bar y café) desde el local del Sr. Daleoso, al edificio del Hotel “Del Globo”, siempre en la misma cuadra de Fontana al 200. Sobre este particular, El Avisador Comercial escribe en noviembre de 1911: “El día sábado 18 del corriente se llevó a cabo la inauguración del nuevo local del Café del Sr. Juan Martino, el que se ha trasladado al antiguo local del Hotel del Globo. Al acto concurrieron numerosos vecinos, los que hicieron honor a un suculento asado a la criolla, que fue servido en la tarde del sábado en el nuevo local”.

En 1910 surge su nombre vinculado con el rubro comercial café, billares y cinematógrafo, según el Anuario de Territorios Nacionales. En 1911 aparecían en la prensa local avisos del Café Martino, que hacen referencia a que dicho establecimiento contaba con restaurant a la carta, salón para bailes y banquetes, salón de piano, campanillas eléctricas en todas las habitaciones, y corralón para coches y caballos.

Fragmento del libro “El living del Trelew”, de Diego Dante Gatica

Compartir.

Los comentarios están cerrados