La exresponsable de finanzas de ATE, Claudia Barrionuevo, señaló que pudieron constatar las transferencias de las cuentas del gremio a las cuentas personales de Guillermo Quiroga y su ex mujer, Mirta Simone.
Este lunes, la justicia realizó la audiencia de apertura de investigación por la causa de presunto desvío de fondos, en la que Quiroga y Simone están bajo sospecha.
“Estuve desde la primera audiencia el año pasado, donde se pasó a cuarto intermedio hasta que finalmente se completó ahora. Fue un largo trecho. Ayer estuve presente, aunque de manera virtual, y también en la anterior donde se abrió la investigación para Mirta Simone”, afirmó Barrionuevo a LU20.
Sobre la gravedad del caso, sostuvo: “Más allá de los fueros, debe ser juzgado con la misma justicia que cualquier ciudadano. Es un delito grave, más allá de lo financiero, porque involucra circunstancias que afectan directamente a los trabajadores. Estamos hablando de mucho dinero en un período en el que los empleados del Estado la pasamos muy mal, con sueldos escalonados e incluso impagos. A pesar de ello, los afiliados continuaron pagando sus cuotas sindicales, y este señor se las quedaba. Es muy grave por lo que representa para la organización y el precedente que deja”.
Barrionuevo detalló el mecanismo utilizado: “Cuando dejé mi licencia gremial en 2019 por razones personales, la administración financiera quedó a cargo de la Secretaría Administrativa, en ese momento liderada por Mirta Simone. En ATE, el dinero puede moverse con dos firmas de las cuatro habilitadas, lo que permitió que Quiroga y Simone operaran sin mi presencia. Además, tenían acceso a banca online, lo que les permitía hacer transferencias desde cualquier dispositivo”.
La ex secretaria de Finanzas relató que, cuando intentó obtener extractos bancarios en la sucursal Belgrano del Banco del Chubut, le informaron que solo podían expedirse con la solicitud de dos de los firmantes. “Cuando finalmente obtuve los movimientos bancarios, constatamos que se realizaban transferencias a cuentas personales por sumas importantes, sin justificación alguna”.
Sobre el manejo de fondos, añadió: “Era tan burdo como sacar dinero de una cuenta y pasarlo a otra sin balances ni controles. Contaban con una impunidad considerable, creyendo que nunca pasaría nada”.
Falta de controles internos
Barrionuevo también cuestionó la falta de fiscalización dentro de ATE Chubut: “Las asambleas y los congresos provinciales deben aprobar memorias y balances, lo que permitiría detectar estas irregularidades. También existen revisores de cuentas designados para esta función. Sin embargo, muchos controles internos no se cumplieron”.
Además, responsabilizó directamente a Quiroga: “El secretario general es quien debe convocar esos congresos y asambleas. La falta de convocatoria a estos espacios de discusión facilitó que todo esto ocurriera sin supervisión”.
Por el momento, ni Quiroga ni Simone han respondido públicamente a las acusaciones. Sin embargo, fuentes cercanas a la conducción del gremio desestimaron la denuncia y la atribuyeron a “motivaciones políticas” en el marco de una interna sindical.
Posibles consecuencias legales
Barrionuevo adelantó que presentará la documentación respaldatoria ante la justicia para que se investigue la presunta malversación de fondos. “Esto no puede quedar impune. Los trabajadores tienen derecho a saber cómo se maneja el dinero que aportan”, subrayó.