La crisis económica continúa profundizando su impacto en la capital provincial y suma un nuevo capítulo con el cierre de la sucursal del Banco Macro en Rawson. La entidad financiera dejará de atender al público a partir del 22 de diciembre, una decisión que vuelve a exponer el deterioro de la actividad privada en la ciudad y el peso de la presión impositiva municipal sobre los comercios.
Según se confirmó oficialmente, todas las operaciones serán derivadas a la sucursal de Trelew, ubicada en 9 de Julio 320, lo que obligará a los clientes de Rawson a trasladarse unos 20 kilómetros para realizar trámites bancarios básicos.
Un importante ejecutivo del banco explicó a La Voz de Chubut que la decisión responde directamente a la caída sostenida de la actividad económica local y a la fuerte presión impositiva que el municipio ejerce sobre la actividad.
“En los últimos años las operaciones disminuyeron considerablemente producto de la crisis económica. Nuestros principales clientes provienen del sector privado y en Rawson la actividad está muy mal”, señaló.
La situación no es aislada. Comerciantes de la capital provincial vienen advirtiendo desde hace meses una baja constante en las ventas, dificultades para sostener costos fijos y un contexto que desalienta la inversión y la permanencia de empresas en la ciudad.
El peso de los impuestos municipales
Uno de los factores centrales que precipitó el cierre, según reconoció el propio ejecutivo del banco, es la elevada carga tributaria local. “Para peor, el municipio nos mata con los impuestos. Para que te des una idea, pagamos 10 millones de pesos de habilitación comercial, 7.400 módulos; 69 millones de pesos de tasa de seguridad e higiene, unos 50.000 módulos; más Ingresos Brutos. Es una verdadera fortuna, no hay comercio que aguante tanta presión tributaria, así es imposible”, lamentó el directivo.
Las cifras reflejan un esquema impositivo que, lejos de aliviarse en un contexto recesivo, se mantiene en niveles que resultan difíciles de sostener incluso para grandes entidades financieras.
Un síntoma del deterioro económico de Rawson
El cierre del Banco Macro no solo implica una pérdida de servicios para los vecinos de Rawson, sino que funciona como un indicador más del debilitamiento del entramado comercial y productivo de la ciudad. La salida de una entidad bancaria de primera línea vuelve a poner en debate el modelo de recaudación municipal y su impacto sobre la actividad privada, en un momento en el que la economía local muestra señales cada vez más claras de agotamiento.


