miércoles, 30 de julio de 2025

Esta proyección, de la consultora Invecq, se basa en los últimos datos del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) difundidos por el INDEC, que mostraron una caída del 0,1% en mayo respecto a abril, pese a una suba acumulada del 6,1% en los primeros cinco meses del año.

El informe señala que “la recuperación iniciada a mediados de 2024 se interrumpió en febrero de este año”.

 

La actividad económica argentina estaría atravesando una nueva fase de desaceleración, y apenas crecería un 1% en el segundo semestre de 2025, de acuerdo con un reciente informe de la consultora Invecq. Esta proyección se basa en los últimos datos del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) difundidos por el INDEC, que mostraron una caída del 0,1% en mayo respecto a abril, pese a una suba acumulada del 6,1% en los primeros cinco meses del año.

El informe señala que “la recuperación iniciada a mediados de 2024 se interrumpió en febrero de este año”. A partir de marzo, en vísperas de la salida parcial del cepo cambiario, la economía comenzó a mostrar señales de estancamiento: los salarios se estabilizaron, el crédito perdió dinamismo y otros indicadores clave empezaron a mostrar fatiga.

Según Invecq, los primeros datos disponibles de junio refuerzan esta tendencia, y advierten que la volatilidad reciente en las tasas de interés y el alto costo del financiamiento también habrían afectado negativamente la actividad durante julio.

Desde una mirada sectorial, la consultora destaca que persisten “diferentes velocidades” en la recuperación. Algunos sectores continúan traccionando, aunque con un crecimiento más moderado, mientras que otros, especialmente los vinculados al consumo interno, enfrentan una recuperación lenta. En contraste, actividades como el turismo receptivo y la hotelería siguen en terreno claramente recesivo.

Pese a este panorama, Invecq mantiene su proyección de crecimiento del 5% del PBI para 2025. Sin embargo, aclara que esta cifra está fuertemente impulsada por el efecto arrastre de la segunda mitad de 2024 y el repunte inicial de este año. En consecuencia, advierten que la economía cerraría el año en niveles similares a los de fines del año pasado, y que el crecimiento adicional necesario para alcanzar la meta del 5% sería de apenas un 1% en el segundo semestre.

“Vuelve a ponerse en evidencia la dificultad estructural de la economía argentina para superar los techos de actividad alcanzados en los últimos años”, concluye el informe. Para romper con esta inercia, la consultora subraya la necesidad de consolidar la estabilización macroeconómica e impulsar reformas estructurales en áreas clave como el sistema previsional, la estructura tributaria, el régimen laboral y las cuentas fiscales, que permitan generar condiciones para un crecimiento sostenido y más robusto en el mediano plazo.

Compartir.

Dejar un comentario