Karina Milei analiza hacer renunciar a un diputado propio para que Diego Spaguolo asuma una banca y tenga fueros por los próximos dos años, como una maniobra desesperada para evitar que hable en la justicia sobre las coimas que habría presenciado y que detallan un sistema de recaudación ilegal que tributaría a la hermana presidencial.
La idea la habría acercado a los hermanos Milei el abogado Francisco Oneto, que sugirió llegar a un acuerdo con Spagnuolo antes de que se siga expandiendo la gangrena. Oneto es cercano a Spagnuolo y a los hermanos Milei. Eso lo convierte en un hombre clave en esta crisis.
Oneto es incluso abogado de Karina y estuvo con el presidente Milei el viernes pasado y no se descarta que lo termine representando en esta causa.
La idea que acercó este abogado es que renuncie un hombre de la lista de diputados nacionales de La Libertad Avanza de 2023 por la provincia de Buenos Aires. Es que quien fue en el undécimo puesto en esa nómina fue el propio Spagnuolo. Como no entró, ya que al Congreso ingresaron los primeros nueve candidatos, Milei pidió que le dieran un cargo a su entonces abogado y por eso recaló en la Andis.
“Spagnuolo estaba desesperado por ser diputado”, recuerda un amigo del ex titular de la Andis. O sea que la oferta de darle dos años de mandato para que no hable, sabe a donde apunta.
Si Spagnuolo consigue ir al Congreso, tendrá fueros por dos años y con eso se demorará la investigación que llevan adelante el fiscal Franco Picardi y el juez Sebastián Casanello, que a diferencia del caso Libra donde la tiene pisada el fiscal Taiano, avanzó con una velocidad que aterró a la cúpula del gobierno.
Los hombres que entraron antes que Spagnuolo son Alberto “Bertie” Benegas Lynch, Guillermo Montengro -ex ladero de Villarruel, nada que ver con el intedente macrista-, Pablo Ansaloni, Eduardo Falcone y Santiago Santurio. Milei debería convencer a alguno de ellos a que renuncie a la banca para dejarle lugar a Spagnuolo.
La ley de cupos obliga que cuando una persona renuncia a su banca lo reemplace alguien de la lista del mismo sexo.
Por estas horas hablan de tentar a Ansaloni, Santurio o Falcone con un cargo en el Ejecutivo. Pero ninguno será fácil de convencer: Ansaloni proviene de afuera de las entrañas libertarias y Falcone abandonó el bloque de La Libertad Avanza para formar parte de la bancada del MID que preside el destratado Oscar Zago.
Santurio es hombre de Santiago Caputo y lograr que deje la banca obligaría a Karina Milei y los Menem a una humillante negociación con el asesor presidencial, a quien corrieron del corazón del poder y del cierre de listas.
Otra posibilidad sería que renuncie Benegas Lynch, que ya metió a un familiar como candidato a senador nacional por Entre Ríos.
Como sea, el clima de desesperación que se vive entre los libertarios es tal, que la reacción ante los audios del ahora ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis) no estuvo coordinada por nadie. Sólo algunos satélites del gobierno se atrevieron a esbozar una defensa, como el filósofo Alejandro Rozitchner, que de acuerdo al registro de ingresos a la Quinta de Olivos pasó algunas noches largas con el presidente y el propio Spagnuolo.
Guillermo Francos trató de vincular a Spagnuolo con Victoria Villarruel, como si hablara de alguien ajeno al gobierno, y dijo que fue la vice y no José Luis Espert, quien acercó al abogado al mundo libertario. Pero rápidamente aparecieron fotos de Spagnuolo junto a Milei años antes de que el ahora presidente conociera a su compañera de fórmula.
Otros como Martín Menem y Alejandro Fargosi intentaron culpar al kirchnerismo de hacer una “operación”. Pero el propio Milei echó a Spagnuolo en un rapto de desesperación, por lo que se encargó personalmente de tapiar esa salida.
El portavoz de Milei, Manuel Adorni, sólo apareció con una frase de autoayuda tras cancelar la emisión de su streaming “Fake, 7, 8”. Ni los ministros ni los aliados del PRO salieron en defensa de Karina y los Menem. Hay una razón principal de este silencio y la parálisis: el temor a la aparición de más audios y hasta un video de Spagnuolo haciendo más confesiones.
Nadie sabe hasta dónde llega el entramado y en las últimas horas empezaron a aparecer contratos con la Suizo Argentina que salpican a medio gabinete: Luis Petri, Mario Lugones y Patricia Bullrich firmaron contratos con la droguería de los Kovalikver, que intentaron escapar con fajos de dólares y dejaron cajas de seguridad abiertas, en medio de los allanamientos.
Fuente: LPO