Los municipios de Rawson y Puerto Madryn volvieron a acudir al auxilio financiero del Banco del Chubut para poder afrontar el pago de salarios. En un contexto económico cada vez más restrictivo, tanto el intendente capitalino, Damián Biss, como su par madrynense, Gustavo Sastre, solicitaron adelantos transitorios para cumplir con sus compromisos salariales de junio.
En el caso de Puerto Madryn, el municipio gestionó un adelanto de 2.500 millones de pesos, mientras que Rawson pidió 350 millones de pesos.
En Rawson, el monto solicitado apenas alcanzaría para iniciar el cronograma de pagos con las categorías más bajas del escalafón municipal. Como ha sido la constante desde el inicio de la gestión de Biss en 2019, los haberes se continuarían abonando de manera escalonada, un esquema que refleja la persistente fragilidad de las finanzas locales.
Ambos municipios enfrentan serias dificultades económicas que, lejos de resolverse, se profundizan. La necesidad de recurrir a estos adelantos –en la práctica, verdaderos salvatajes financieros que otorga el Banco del Chubut– pone en evidencia la falta de recursos propios y la escasa autonomía financiera de los gobiernos locales.