La presidente de la cooperativa de Rawson, Josefa Ávila, admitió que el embargo de casi mil millones de pesos que la justicia dictó por deudas de la institución con CAMMESA y la falta de tarifas podrían llevar a la quiebra a la cooperativa.
A pesar de ser la máxima autoridad, Ávila mostró un total desconocimiento del funcionamiento y los números de la cooperativa, como muestra de ello aseguró que de los 900 millones de pesos que ponen al cobro mensualmente, “$405 millones es el corriente que deberían abonarle a CAMMESA” por el suministro de energía. “Estoy aprendiendo día a día sobre el funcionamiento de la Cooperativa, yo pensé que esto funcionaba, me voy desasnando día a día”, reconoció.
Según la presidenta, la falta de tarifas pone a la cooperativa al borde del colapso. “La municipalidad es el ente que concede el servicio, pero nosotros con la municipalidad hemos hablado poco, porque nos concede el servicio, pero no nos ofrece las tarifas y acá, sin tarifas, no se puede trabajar”, expresó.
Para peor, la confirmación del embargo por casi 1.000 millones de pesos profundiza la mala situación. “La cuenta que nos embargaron es la del Banco Nación, que utilizamos para abonar los sueldos del personal. Pero con lo que recaudamos no llegamos a cubrir el corriente, no hace falta ser muy inteligente para darse cuenta que vamos a ir a la quiebra”, sentenció.
Si bien el panorama es poco alentador, Ávila confía en que un acuerdo político pueda revertir esta extrema situación. “Vamos a tratar de hacer una reunión con alguien del Gobierno provincial para ver si ellos nos acompañan a hablar con los funcionarios de Nación, Josefa Ávila no va a ir sola a Nación a arreglar esto. Estos se soluciona con un acuerdo político”, explicó.
Por último, la presidente recordó que estas deudas vienen de 2017: “Estamos haciéndonos cargo de las deudas que nos dejó la gestión anterior”.