Recientemente, la Cámara de Tabaco de Jujuy celebró acuerdos con el Consulado de Bolivia buscando la inclusión formal de todo trabajador del país extranjero que quiera desempeñarse en el área rural.
Esto se debe a las dificultades que enfrenta ese sector productivo provincial a la hora de sumar trabajadores para llevar adelante la campaña. Además, contarán con todas las prestaciones formales que la ley exige.
El presidente de la entidad, Pedro Pascuttini, aseguró que para ellos es un “tema muy importante”, ya que la imposibilidad de contar con la mano de obra limita la cantidad de hectáreas que pueden trabajar.
“Tenemos 172 jornales que utilizamos por hectárea, hacemos 12.500 hectáreas y este año entendemos que podemos hacer más”, señaló tras el encuentro mantenido el lunes con el cónsul del Estado Plurinacional de Bolivia en Jujuy, Juan Ino Mamaní.
Además, en esta oportunidad, Pascuttini aseguró darle seguridad sobre el estricto cumplimiento de los protocolos jurídicos nacionales a todos los bolivianos, constituidos para todos los trabajadores nacionales. De esa manera los trabajadores del país limítrofe podrán acceder a los beneficios y a la protección que la ley argentina ofrece a los trabajadores.
“Los trabajadores extranjeros se desempeñarán dentro del marco jurídico que nuestro sistema exige, lo cual implica la registración formal, con los aportes sociales, gremiales y los seguros pertinentes”, indicó Pascuttini.
Por su parte, Mamaní destacó: “Entendemos que Jujuy es una provincia en la que el tabaco es una de las producciones más importantes y si nosotros podemos ver la situación de nuestros compatriotas y que ellos puedan trabajar, por supuesto que estamos para apoyar”, subrayó.
¿Por qué cayó la mano de obra Argentina?
Hay varios factores que influyeron en la caída de la mano de obra en esta área. El más recurrente es el temor de los beneficiarios de planes sociales a perder las asistencias (pese al Decreto Nacional 514, que los hace compatibles con los empleos temporarios).
También se debe a la disminución del número de trabajadores golondrina de Bolivia por la devaluación del peso argentino.
Según estimaciones locales, en el pico de la campaña el sector puede llegar a requerir en Jujuy cerca de 13 mil trabajadores.
La preocupación por las dificultades para acceder a la mano de obra necesaria alcanza también a los empresarios tabacaleros de Salta, desde donde estiman que el sector perdió en tres años unos 2.700 trabajadores.