En el marco de una interpelación solicitada por los siete miembros del Concejo Deliberante de El Hoyo, el intendente Pol Huisman insistió con que “fue un accidente de trabajo y le pudo pasar a cualquiera”, en referencia al hundimiento de una máquina retroexcavadora en el interior de la chacra “El Monje”, propiedad de su familia.
Rodeado de sus funcionarios, el jefe comunal adelantó que el costo del operativo de rescate “demandó unos 400 mil pesos de nuestra arcas, ya que tanto Vialidad Nacional como Provincial pusieron técnicos y maquinarias, además de los repuestos que insumirá la reparación”.
Un equipo de expertos de la firma proveedora viajará la semana próxima a la localidad andina “para evaluar los daños y tener un diagnóstico certero de su situación”.
No obstante, aclaró que “el municipio ya facturó al IPA casi cinco millones de pesos por la limpieza de un canal de un kilómetro, además de ahorrar unos 62 millones de pesos en concepto de obras hídricas en unos 16 kilómetros de arroyos y canales”.
Huisman y el secretario de Planeamiento, Julio Ruiz, estuvieron dos horas brindando explicaciones a los ediles y respondieron todas las preguntas, fundamentalmente las referidas a la cobertura de seguro de la máquina siniestrada, condiciones laborales del operario (quien no pertenece a la planta de personal de la comuna) y las razones por las que estaba trabajando un día domingo sobre el lecho del arroyo Leiva y los canales derivadores.
“La vida humana vale más que un fierro y mi responsabilidad es cuidar a las personas”, recalcó el intendente en referencia al plan de trabajo para evitar inundaciones que comenzó en marzo pasado y que se extendió prácticamente por todo el ejido.
La sesión especial estuvo encabezada por el presidente del cuerpo deliberativo, César Salamín, y participaron los concejales Gisel Cortés, Gretel Arce, Dora Mariguan, Fanny Avalos, Gustavo Flak y Ariel Szudruk.
Al cierre, Pol Huisman dijo que “me voy con una linda sensación, valorando el trabajo conjunto de las instituciones democráticas. Al principio, sentí que hubo una manipulación o uso de una desgracia con un fin político, aunque finalmente todo quedó encauzado en la función de cada poder del estado municipal”.
“Dentro de ese marco de respeto –agregó-, fuimos explicando lo que hicimos y pudimos demostrar claramente el plan de trabajos y no quedó ninguna pregunta sin contestar. Fue un trabajo pensado para el pueblo y se intentó disfrazar un interés personal, pero quienes me conocen saben que no existe”.
En respuesta a versiones de una posible suspensión o destitución de su cargo, Huisman contrapuso que “sigo trabajando para los vecinos, también dijeron que no íbamos a poder sacar la máquina enterrada, pero siempre estuve convencido de lograrlo. Ahora otros dicen que tampoco se podrá reparar, pero les digo que sí se podrá”.
Enseguida se enfocó “en el consorcio pensado con el resto de municipios cordilleranos para el uso del parque de maquinarias conseguidos ante el Gobierno nacional. Es un patrimonio en herramientas que va a estar al servicio de las cinco localidades de la comarca, más allá de que ni los abogados dan con la figura jurídica para su conformación”.
Roles
A su turno, la concejal Gisel Cortés (Chusoto), indicó que “no me quedaron dudas, las explicaciones técnicas fueron muy claras” y que “la mayoría de las inquietudes fueron contestadas. Ahora quedamos a la espera de la llegada de los técnicos para saber si la máquina sufrió algún daño y cuál va a ser el valor de su reparación”.
Tras remarcar que “nuestro rol como Poder Legislativo es poder interpelar al intendente”, atribuyó que “las redes sociales dan para mucho, es fácil escribir cualquier cosa”, en referencia a un posible uso político de la coyuntura por una parte de la sociedad.