miércoles, 17 de diciembre de 2025
Primera población Estancia Miche Hnos (Cabo Raso). Fotografía del álbum de Foresti

EDUARDO MICHE – FERNANDO MICHE, familia de origen suizo. Figuran con DARDO ROCHA y otros entre los fundadores de la ciudad de LA PLATA, en noviembre del año 1882. El patriarca, EDUARDO MICHE, se desempeñó como mayordomo de la estancia “San Juan”, de Iraola, en la Provincia de Buenos Aires.

Los hijos nacidos en LA PLATA, de nombre EDUARDO, ALFREDO, y ENRIQUE, fueron pobladores de la zona de Cabo Raso, desde el fin de siglo XIX. Los hermanos Miche, al asentarse en estos campos, han trabajado con gran entusiasmo por la ganadería.

Eduardo Miche (h), se dedicaba a la venta de antisárnicos, es así que llega al Chubut, con su hermano Alfredo a fines del siglo XIX. En Camarones conoce a un ganadero, que por motivos de salud debe viajar a Buenos Aires. Hacen un trato de que cuidará su campo por seis meses, hasta el restablecimiento del mismo. Pero tarda más de lo convenido, dos años, y el ganadero que sería Julio Schelkly, fallece.

En forma fortuita decide su destino ganadero. Tiempos de asentarse y poblar, por lo general campos abiertos. Gran trabajo mantener la hacienda, y quizá Don Eduardo, ya aquerenciado al lugar, resuelve afincarse en dicho campo, que más tarde solicita y compra. Así nació “BERNA”, el campo familiar y la estancia ovejera. Poblar, alambrar, luchar contra las inclemencias; trabajo y persistencia.

Por suerte lugar con agua, y muy buena vegetación. Don Eduardo Miche figura entre los socios de la Sociedad Rural de Camarones desde los comienzos.

Alfredo se radicó y pobló el campo cercano a la costa de Cabo Raso y lo llamó “EL PUERTO”, años después tenía una chacra en Gaiman.

Enrique Luis Miche ocupó un campo en la zona reserva de Santa Elena a principio de siglo XX, el Lote 17 de la parte Sur y fracción del lote 24, desde 1906. Casado, padre de 5 hijos. Posteriormente se radicó en La Plata. Enrique Miche, hijo, había nacido en La Plata, en 1894, pero fue criado en Cabo Raso y abrazó la vocación religiosa.

Se ordenó sacerdote salesiano y fue también pintor; pues tanto como por la oración, fue subyugado por las bellezas cordilleranas.

Vivió muchos años en San Carlos de Bariloche, en el Colegio Monseñor Cagliero, y expuso en las principales ciudades de la República. Con su breviario y su mochila de andariego, llevando lienzos óleos y caballetes, dejó a la posteridad los más hermosos paisajes sureños.

viene a la memoria el trabajo, el esmero y celo puesto en la gran empresa ganadera Quiza por tenerlo tan presente mi padre político en sus conversaciones, me emprendida por Don Eduardo Miche, casado con María Schulze, alemana de Hamburgo, a la que conociera en Adrogué.

Se radicó en LA BERNA y desde allí extendió su poderío en el trabajo de campo. Siempre fue un adelantado a su época y tuvo buenos carruajes para desplazarse. Me contaba Juan Enrique Lacoste, que entre sus coches había un hermoso charrete, de cuatro asientos, muy ligero y ágil, conducido por un caballo.

Según contara Juan Heinken, había traído las primeras ovejas malvineras a la zona. En las arreadas desde Santa Cruz, solían llevar aborígenes para las tareas, quienes preparaban los asados y el pan era amasado en las caronas. Dejó un campo a cada hijo, pues manifestaba que la mejor inversión era la tierra. Hombre de finos modales y gustos refinados, próspero, ávido siempre de las novedades para el trabajo y la comodidad, fue de los primeros en tener automóvil. Envió a su hijo Ernesto a Puerto Madryn para el aprendizaje del manejo y atención mecánica. Ernesto estuvo pupilo en Puerto Madryn, en la escuelita del maestro Toschke, donde aprendió el alemán. También hizo construir una hermosa casa en Trelew para su familia, en la actual calle 28 de Julio, Nº 371, con un marcado estilo europeo.

De esa residencia, mi esposo recuerda que de niño le impactó en la sala principal un cuero de puma, a modo de alfombra, cazado en la zona de Cabo Raso, con la enorme cabeza de fauces abiertas, y sus colmillos y uñas naturales.

Tuvo 6 hijos, 4 varones y 2 mujeres, que también dedicaron su amor al campo.

Ernesto, y demás descendientes, viven en su campo SANTA ANA, cerca de Garayalde y lindando con Las Quebradas. EL GAUCHITO, fue de Carlos Teodoro Miche en la zona de Salamanca.

LOTES DE LA FIRMA GARBARINI-E-A-C-A – Fueron comprados por Don Eduardo Miche. LA ENERGIA fue el primitivo nombre de esta estancia, siendo el encargado y poblador Silvano Zamora, posteriormente propiedad de la Señora Marta Miche de Alonso y hoy denominado SAN EDUARDO.

Fotografía actual de la Estancia “Berna”

Al presente, LA BERNA, LA PAMPA y SAN EDUARDO, en el Departamento de Florentino Ameghino, son propiedades de la familia de Néstor Miche, hijo de Leandro Miche. Cumplido centenario de LA BERNA.

CUARTA GENERACION DE LA FAMILIA MICHE.

 

Texto de “Pioneros de la Costa del Chubut” – Isabel Caminoa de Heinken

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