Nacido en la provincia de Mendoza el 19 de junio de 1923. Llegó por primera vez a Corcovado en el año ’58 como colaborador de un Comisario ya que en el pueblo habían ocurrido varias muertes y venían a realizar los sumarios correspondientes. Pero el 21 de junio de 1960 viene nombrado como Comisario titular de la Comisaria Distrito Corcovado.
Salió de Esquel a las 8 horas llegando a Trevelin a las 11 de la mañana. Allí le designaron un ayudante, Santos Gómez, que le serviría de guía y al mediodía, después de cargar dos petacas con ginebra, partieron hacia Corcovado. A la altura del frigorífico de Trevelin ya comenzó a nevar y en la subida de Miguens había un metro de nieve. A tranco corto y con mucho frío siguieron viaje y a las 2 de la madrugada llegaron a Valle Frio. Allí descansaron. Con el mismo caballo muy temprano partieron a su destino final. A las 13.15 bajaban al pueblo.
Venía con su uniforme y su gorra que en aquel entonces lo había mandado el general Perón. Toda la gente salía a ver quién había llegado. La comisaria, que se encontraba en ese año en el mismo lugar que la actual contaba con cuatro habitaciones de adobe, una era la cocina, en otra estaba la guardia y en las restantes vivía él, no había calabozo.
El personal de la comisaría a su llegada estaba compuesto por: Cabo Alfredo Díaz, Agente Segundo Mellado, Agente Segundo Muñoz, encargado de la radio, y el Oficial Vicente Callinao.
Aproximadamente en Corcovado había 200 habitantes y en Corcovado sur la gente vivía más acercada. En el pueblo no habría más de cinco vehículos.
El primer calabozo se construyó de madera con la ayuda de Oscar Generoso Pérez, que era guardabosque en aquel momento. Luego se construyeron una cuadra y la estación de radio.
La población colaboraba mucho con donaciones y bailes a beneficio que se realizaban en una enramada que existía. En aquella época se convivía como en familia. Con los agentes y presos se reparaban los caminos.
Los policías fueron los promotores para la instalación de un motor que diera electricidad. Existió un oficial Pedro Barr que era técnico y con él se hicieron las primeras instalaciones eléctricas en las casas de Fermín Larra, Emiliano Larrea, a la familia Troncoso, Castro, Vargas y también dos faroles en la calle.
Antes la gente usaba lámparas de Petroman, cuando llegó solo había dos en todo el pueblo.
En el año 1962 se fue a la comisaría Distrito Tecka con el grado de Principal. La familia Torres pidió al gobierno que volviera don Roberto. En el año 1963, el escribano don Roque González lo asciende a Comisario y vuelve a Corcovado. Ya había más vigilantes: Méndez, Castro, Muñoz.
Todos recorrían la jurisdicción a caballo: Valle Hondo, Barrancas, Arroyo las Mentas, hasta la cordillera y todo el lote 22 y 23. En hacer un recorrido se tardaba alrededor de 15 días.
Donde está la usina actualmente se colocó la enramada y la gente se reunía para bailar y divertirse en aquel lugar. Los bailes eran animados por Don Molina, un poblador que vivía a orillas del Huemul. Tocaba el acordeón con algún acompañante de guitarra y por tubería lo alimentaban con algún vinito y así bailaban toda la noche.
Cuando había algún acto importante se utilizaba la escuela vieja.
La comunidad necesitaba un lugar de reunión y así nació la idea de crear un club. Los promotores (algunos) fueron Paula Poblete, Abdulio Marín, Berta Guzmán y otros.
Donde hoy está la sala velatoria había una sala de primeros auxilios. En caso de accidente, Don Roberto abría camino con dos tropillas de caballo y una vagoneta hasta valle Frío y allí lo esperaba un Jeep para llegar hasta Esquel.
Los caminos eran huellas de carro.
Un hecho de importancia mientras era comisario fue el litigio con Chile por el Valle California. El arbitraje lo realizó la Reina de Inglaterra. Dos muertes se habían sucedido en esa zona y don Roberto tuvo que realizar los sumarios que luego pasaron al Juzgado de Esquel, a su vez Chile también realizó estos sumarios. Ambos, los chilenos y los argentinos se encuentran en el Tribunal de la Haya, los que fueron enviados para realizar la observación. El fallo de este litigio dio como resultado que el Valle pertenezca a Chile.
Don Roberto también recorrió otros lugares de la provincia como Río Pico, Comodoro Rivadavia, Gan Gan, Gualjaina, y en el año ’72 se jubiló después de 32 años de servicio continuado.
Él y su familia se encuentran asentados en esta localidad.
Libro “Corcovado, historias y recuerdos”