
En el yacimiento de Km. 3, en 1923, hay un fuerte interés en crear una escuela para niñas bajo el manto protector de María Auxiliadora, para eso trabaja el Círculo Católico San José presidido por Humberto Beghin. Kermés tras kermés juntan fondos para la creación de esta escuela.
Es que ya está en marcha la iniciativa del Instituto María Auxiliadora que, conmemorando el cincuentenario de la llegada de los salesianos a la Argentina, inaugura colegios aquí y allá, entre los que figura el de Comodoro Rivadavia, para felicidad de las familias que aspiran a una educación religiosa para sus hijas.
En agosto de 1923, la obra del colegio avanza, tiene dos salones con paredes y techos y una precaria instalación de luz, hasta allí se traslada parte de la Escuela N° 24, después del incendio del 25 de agosto, con tablones de madera se improvisaron bancos y escritorios; el 10 de marzo del año siguiente, las hermanas tienen libre las instalaciones y pueden seguir con la obra. Desde noviembre pasado están en el pueblo las hermanas salesianas, María Peisino y María Montaldo, para hacerse cargo del colegio. Las hermanas cuentan con una comisión de damas que se hace cargo de “la recaudación de las sumas mensuales que sean recolectadas y que deberán depositarse mensualmente en el Banco de la Nación Argentina a la Orden Conjunta de las Hnas. María Peisino y María Montaldo y Sras. Anastasia T. de Gómez y Clarisa G. de Herrera”.
Recién en 1925 el colegio Catalina Daghero, de la orden religiosa María Auxiliadora, recibe a sus primeras alumnas.
Fragmento del libro “Crónicas del centenario”