Rawson es una ciudad que por ser nuestra región –tal como la definió el Prof. Carlos Malbárez- “Madre de ciudades del centro y sur de la Patagonia”, tiene una rica historia que no ha sido lo suficientemente investigada, y donde prácticamente está todo por hacer. Este trabajo es un mínimo aporte que quiero realizar a la construcción de una historia para esta ciudad, a la que muchas veces parece sucederle al acontecer histórico sin animarse a ser su protagonista.
Es doloroso y agraviante ver el estado lastimoso en que se encuentra el principal edificio histórico de nuestra ciudad, tal cual es la cede ubicada en fontana 50. Las reiteradas promesas de reconstrucción no han sido cumplidas, y tras su ruinosa esta, también en total estado de abandono, el archivo histórico de la provincia.
El actual edificio de Fontana 50 fue realizado casi en su totalidad durante la gobernación del Dr. Antonio Lamarque (1913-1917). Al hacerse cargo de la gobernación, Lamarque se encuentra con un edificio bastante deteriorado. En nota cursada al director de territorios nacionales lo describe como “cuatro piezas donde están apiñadas todas las oficinas de la gobernación, que es por otra parte lo que constituye todo el edificio de la Casa de Gobierno, y de la casa de los gobernadores, no tiene ningún otro edificio fiscal (…) en ese edificio funcionan las pobres y primitivas oficinas con que cuenta esta gobernación. Existen aquí cuatro oficinas: secretaria, contaduría, mesa de entrada, marcas y estadísticas. Las dos primeras cuentan con dos empleados y el titular, y las dos últimas con un solo empleado (…).
Ante este panorama, la primera actividad que el gobernador Lamarque emprende a su llegada, es la refacción del edificio de gobierno construido por la Compañía CIA Prunieres en 1901. En un detallado informa al gobierno nacional (julio de 1914) describe lo que el mismo define como la institución de obras de ciertas importancia, y que comprendía la construcción de un garaje y taller de 70m2 de superficie; de una caballeriza, pisos, cielorrasos, revoque, y blanqueo de las oficinas, empedrado todo el patio 400m2 construcción de un pequeño galpón para gallinero; un invernadero, una galería de cristales de colores en frente de la casa; pintura y empapelado de toda la casa; colocación de ventanas y puertas; arreglo de un comedor de 9 por 4 metros, etc.
Poco después de realizados estos trabajos, Lamarque da inicio a su obra más ambiciosa: la construcción de la fachada del edificio sobre la diagonal Fontana. Para llevarla a cabo gestionara y conseguirá fondos del gobierno nacional. En pocos meses, y con gran parte de la mano de obra realizada por los presos de la cárcel bajo la dirección de Juan Fiorini, se levantó el edificio. Para los trabajos de carpintería se contrató en Buenos Aires al señor Lorenzo Panza.
Retomo aquí la hipótesis por la cual sostengo que el edificio construido en 1901 por la compañía Pruniese quedo detrás de la nueva fachada en el centro del triángulo. Posteriores modificaciones los fueron incorporando hasta conformar un todo con la construcción emprendida por Lamarque.
El “periódico cruz del sur” editado en esa época por los padre salesianos de Rawson decía en su número 532del 22 de mayo de 1915; “los habitantes de Rawson quedan asombrados por los edificios de las de 60 más que el gobernador Lamarque mando a levantar para varias reparticiones nacionales. Una vez revocado y con aceras presentara el aspecto de un verdadero y buen palacio de gobierno como lo tienen varias provincias. Y para tanto no concedió la gobernación del Ministerio más de ocho mil pesos, con estos, y con los elementos de cárceles, y la personal dirección de Lamarque se ha llegado a tanto. Con este motivo la capital esta de felicitaciones, no tan solo por contar con un valioso edificio más, sino también por las consecuencias que de una obra tan importante para su porvenir resultan”.
En el N°535 del 12 de junio y en referencia la mismo tema se hacía notar que “la fotografía del nuevo edificio de la gobernación que el señor gobernador llevo al Ministerio del Interior para enseñar los trabajos realizados con el insignificante subsidio de los ocho mil pesos ha llamado justamente la atención, dejando al señor ministro excelentemente impresionado. El Dr. Lamarque aprovechando la oportunidad ha solicitado 30.000 pesos más prometiendo edificar los tres lados del triángulo en cuyo centro se allá el antiguo edificio del gobierno”.
Evidentemente la expresión: “en cuyo centro se halla el antiguo edificio de gobierno”, es lo suficientemente grafico como para no albergar demasiadas dudas al respecto a lo arrojado a la hipótesis. Algunos investigadores pretenden que el edificio construido por la compañía Prunieres en 1901 sería la actual residencia del gobernador, versión que a partir del testimonio cotidiano de la cruz del sur debiera quedar descartada.
En la edición del 11 de septiembre de 1915 en su coloquial estilo de redacción, La Cruz del Sur informaba que “favorecidos por una suave brisa recorrimos días pasados los alrededores de la gobernación y sus adyacencias, y quedamos gratamente sorprendidos por los adelantos de las obras de construcción llevados en tan breve tiempo (…) el que hubiera visto la casa de la gobernación de 10 años ha quedaría admirado al verla tan trasformada. Según tenemos entendido, para diciembre se inaugurará el nuevo local (…)”.
La crónica habla de una trasformación sobre lo que ya estaba edificado, lo que apuntaba, aún más, la hipótesis de que el actual edificio de Fontana 50 se realizó a partir del edificio construido en 1901.
La casa fue inaugurada durante la gestión del gobernador Lamarque, quien no pudo disfrutarla mucho tiempo como era su anhelo, ya que su mandato finalizo a mediados de 1916.
Nota de Archivo de “El Informador Capitalino”