El fallido ataque con arma de fuego contra la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha causado un alto impacto político. Los presidentes de Chile, Perú, Ecuador, Cuba, Bolivia y España, el Gobierno de México y los expresidentes Lula da Silva, de Brasil, y Evo Morales, de Bolivia, repudiaron lo que consideraron un ataque a la democracia.
“El intento de asesinato a la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, merece el repudio y condena de todo el continente. Mi solidaridad con ella, el Gobierno y el pueblo argentino. El camino siempre será el debate de ideas y el diálogo, nunca las armas ni la violencia”, escribió Boric en su cuenta oficial en Twitter. “Mi solidaridad con nuestra compañera Cristina Kirchner, víctima de un fascista criminal que no sabe respetar las divergencias y la diversidad”, escribió Lula. Según informó desde Buenos Aires la policía, el atacante se llama Fernando Andre Sabag Montiel y es de nacionalidad brasileña.
“Cristina es una mujer que merece el respeto de cualquier demócrata del mundo. Gracias a Dios está ilesa”, escribió Lula, de reconocida amistad con la vicepresidenta Argentina. No ha habido, de momento, reacción oficial del Gobierno de Jair Bolsonaro.
Evo Morales, en tanto, consideró el ataque un “cobarde intento de magnicidio” a quien consideró “una hermana”. Toda nuestra solidaridad a la vicepresidenta. La Patria Grande está contigo hermana. La derecha criminal y servil al imperialismo no pasará. El pueblo libre y digno de Argentina la derrotará.
El primer presidente en reaccionar ha sido el boliviano Luis Arce. “Desde el Estado Plurinacional de #Bolivia enviamos todo nuestro apoyo a ella, a su familia, al gobierno y pueblo argentino”, escribió. Luego lo hizo Gabriel Boric y más tarde el peruano Pedro Castillo. “El Gobierno peruano condena el atentado ocurrido hoy contra su vida. Repudiamos todo acto de violencia”, dijo. El ecuatoriano Guillermo Lasso dijo que su Gobierno rechaza “el el odio y la violencia”. Desde Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que el ataque contra Cristina Kirchner “busca desestabilizar la Paz del hermano pueblo argentino”. “¡La Patria Grande está contigo compañera!”, agregó. También el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, aseguró que su Gobierno está “consternado por el intento de asesinato” y transmitió toda su “solidaridad a la vicepresidenta, al Gobierno y al pueblo argentinos”, añadió Díaz-Canel en un tuit.
En España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha condenado el ataque y manifestado, a través de Twitter, su “cariño y solidaridad” a la vicepresidenta y el apoyo de su Ejecutivo a Fernández y a todo el pueblo argentino:
En Colombia, ni el presidente Gustavo Petro ni ninguno de los expresidentes colombianos se han pronunciado sobre el atentado. Tampoco miembros del gabinete. El Gobierno mexicano reaccionó a través de su secretario de Exteriores, Marcelo Ebrard: “La solidaridad más completa de México con Cristina Fernández y el Gobierno de la República Argentina”.
Estados Unidos condenó también el intento de magnicidio a través de un tuit de su embajador en Argentina, Marc Stanley: “Estamos aliviados de saber que la vicepresidenta Cristina Fernández esté bien. Estados Unidos se une a la Argentina y a toda la gente pacífica en el rechazo a la violencia, al extremismo y el odio en todas partes”.
El atentado se produjo a escasos metros del edificio de la expresidenta, en el lujoso barrio porteño de Recoleta, donde cientos de manifestantes se congregan desde hace días para respaldarla en medio de un juicio contra ella por presunta corrupción. Cuando la expresidenta llegaba a su domicilio, rodeada de gente, un hombre kla apuntó con una pistola en la cabeza. La imagen fue captada en directo por los canales de televisión. El hombre apretó el gatillo y, pese a que a las primeras informaciones apuntan a que estaba cargada, no salió ningún disparo.