Después de haber permanecido entre nosotros durante 27 largos años y de haber sido uno de los primeros médicos radicados en la zona, se ausenta del Territorio el 5 de julio, para ir a vivir con su hijo Nicolás a Buenos Aires, el siempre recordado y querido médico Dr. Ángel Federici, acompañado por su gentil esposa. Los vecinos de Rawson y Trelew en particular, y los de todo el valle en general, tienen del noble galeno recuerdos imperecederos de su obra, la que por algunos años ejerció sólo en estas apartadas latitudes, afrontando las incomodidades y las carencias propias de aquella época. ¡Cuántas madres, cuántos viejos amigos, cuántos beneficiados no sabrán cómo podrían acostumbrarse sin ver al querido Dr. Federici, que tantas atenciones había tenido para con ellos en su profesión de médico, la que ejercía como un apostolado!
Su alejamiento se produjo en forma más o menos repentina, por lo que sus amigos se sintieron en deuda con él, al no haber podido tributarle una cariñosa despedida, digna del aprecio que le tenían. Por su parte el Dr. A. Federici también se alejaba de la zona con un sentimiento de profunda nostalgia, al manifestar en su carta-despedida lo siguiente: “Dejo en el Chubut muchos años de mi vida y de trabajo; mis aspiraciones estarán colmadas al saber que también he sabido dejar algún afecto y un recuerdo”.
Por su parte el semanario “El Pueblo” agregó adjunta a una de sus ediciones, como homenaje y recuerdo del viejo galeno.
Textos de Matthew Henry Jones