Este martes a las 9 de la mañana comenzará en Lago Puelo el juicio por la desaparición de José Crettón, el joven que fue visto por última vez el 11 de agosto de 2022 en El Maitén. Según sostiene la Fiscalía, la hipótesis principal apunta a que Crettón habría sido secuestrado y asesinado por Daniel Napal y Carlos Peinipil, aunque su cuerpo nunca fue encontrado. Seis mujeres y seis hombres conforman el jurado, otros cuatro serán suplentes ante cualquier eventualidad.
Lucas Crettón, tío del joven desaparecido, expresó en una entrevista a LU20 la importancia de este proceso judicial y las pruebas que incriminan a los acusados. “Hay 40 testigos, pruebas y escuchas telefónicas que ubican a Napal y Peinipil en el lugar exacto donde desapareció José”, señaló. Además, mencionó que se han realizado 114 rastrillajes, con la participación de fuerzas nacionales y provinciales, sin resultados positivos.
Uno de los puntos clave del juicio es la posibilidad de que haya una tercera persona involucrada. La Fiscalía sospecha de un individuo que viajó desde Esquel a El Maitén la noche de la desaparición y regresó de inmediato, pese a que en sus declaraciones negó haber estado en la zona. “La investigación indica que sí estuvo en Maitén”, afirmó Crettón. También se espera que la hija de Daniel Napal brinde información relevante, ya que se sabe que participó con un vehículo y podría aportar detalles clave.
Por su parte, la querella y la Fiscalía pedirán la pena de prisión perpetua para Napal y Peinipil, basándose en los agravantes del caso. Se sostiene que el crimen fue un “homicidio transversal”, ya que Napal habría atacado a Crettón como una forma de ejercer violencia de género contra su expareja. En el caso de Peinipil, la acusación apunta a que su participación fue a cambio de dinero, lo que lo calificaría como un “sicario” en términos populares.
Entre las pruebas más contundentes figuran las pericias telefónicas. Los registros de las antenas muestran que la noche del 11 de agosto de 2022, los teléfonos de José Crettón y Daniel Napal estuvieron en el mismo lugar, cuando en circunstancias normales utilizaban redes distintas. Además, el teléfono de Crettón desapareció por completo del sistema, lo que sugiere que fue destruido. Otro dato relevante es que Napal compró 20 litros de nafta un día antes de la desaparición.
Por otro lado, en una escucha telefónica, Carlos Peinipil le relató a un primo los detalles del crimen. “Los Crettón lo andan buscando como locos, pero el otro boludo lo agarró, le metió dos tiros en la cabeza y encima yo le corté el cuello. Después quemó todo”, habría dicho.
Este juicio será complejo, ya que se juzga un homicidio sin la aparición del cuerpo de la víctima. La audiencia comenzará con los alegatos y se espera la declaración de varios testigos clave. La familia de José Crettón espera que el proceso judicial finalmente traiga justicia y esclarezca los hechos que rodean la desaparición del joven.