El secretario general de Gobierno, Alejandro Sandilo, estaría muy enojado con los agentes de la Contaduría General por la rigurosidad que muestran a la hora de controlar los papeles que presentan los proveedores para poder cobrar, algunos de ellos muy cercanos al hombre de confianza del gobernador Mariano Arcioni.
Según se escuchó en los pasillos de Gobierno, Sandilo se habría quejado con otro funcionario por la cantidad de papeles y explicaciones que los proveedores del Estado deben presentar para que la Contaduría General les libere los pagos.
“Las cosas se rompen y en el estado la inmediatez no existe. Es muy difícil dar respuesta inmediata cuando para pagar algo tienen que pasar por los escritorios y las firmas de diez personas”, se quejó el funcionario, quien ejemplificó: “El pago a un proveedor amigo estuvo parado en contaduría 20 días y no le aprobaron la orden de compra. Se tuvo que venir desde la cordillera a Rawson a explicarles su situación para poder cobrar”.
“Le dan vueltas a todo y la verdad que cansan, muchas escuelas demoraron en ponerse a punto porque Contaduría siempre tenía algo para objetar. Yo puedo ser paciente y comprensivo pero si siguen así me van a saber quién soy”, amenazó y remató: “Pensar que estos tipos (por los trabajadores de la Contaduría General) en la época de (Mario) Das Neves firmaban y pagaban todo lo que llegaba con los ojos cerrados”, aseguró con cierta resignación.