Para el 3 de septiembre de 1939, Trelew Automóvil Club tenía programado una gran reunión deportiva en la que se realizarían 4 pruebas automovilistas y dos ciclísticas a llevarse a cabo en el circuito de “La Radio”, en la zona noroeste, reunión que debió ser suspendida debido a un accidente ocurrido con uno de los participantes, el miércoles 30 de agosto, en circunstancias en que se encontraban probando sus coches, un Ford T, preparado personalmente por el corredor Miguel Huarte, a quien acompañaba en esos instantes el joven Leonardo Aicardi, sufriendo un vuelco que despidió a sus dos ocupantes, a consecuencia del cual el joven Aicardi sufrió la fractura del cráneo, fue atendido de inmediato y trasladado a la sala de primeros auxilios, pero dejó de existir pese a la operación de urgencia que practicaron los doctores Adolfo Margara y Roberto Buzzi.
Por su parte el corredor Huarte también recibió heridas de consideración, pero la suerte lo favoreció pudiéndose reponer en pocos días.
Al sepelio de los restos de este joven de 34 años, que se efectuó en el cementerio local el viernes 1 de septiembre, asistió una nutrida concurrencia que demostró su sentido pesar que su desaparición había causado en nuestro pueblo.
El domingo 1 de octubre se realizaron carreras de automóviles en el circuito de “La Radio” organizadas por el club, al que concurrió gran cantidad de público, el que salió muy contento con el espectáculo que se le brindara.
La carrera de kilómetro lanzado con 500 metros de embalaje, en la que intervinieron 3 competidores, fue ganada por el escribano Vicente Martínez, ubicándose en los puestos siguientes Ángel Castro y Francisco Pérez Aguirre. En esta prueba la nota simpática la constituyo la presencia como acompañante del vencedor de la señorita Nieves Oribe, cuya presencia fue gratamente comentada.
En la prueba de fuerza libre, que consistía en dar 5 vueltas al circuito, se impuso el corredor Ángel Castro (h), a razón de 98,500 kilómetros por hora, ubicándose luego por orden de llegada Francisco Pérez Aguirre, Vicente Martínez y Rocío Ortiz. El premio consistía en $ 250 m/n que el señor Ángel Castro (h) donó al Trelew Automóvil Club cuando le fueron entregados en el baile que se organizó en el Teatro Español después de las pruebas.
También se había organizado una interesante carrera ciclística a la americana, con equipos de dos corredores, los que debían dar 4 vueltas al circuito (28 kilómetros). Esta era la primera vez que en nuestro medio se realizaba una prueba de esta naturaleza, razón por la cual la misma había despertado gran interés.
Para disputar el premio, consistente en $100 m/n en efectivo, se inscribieron 5 equipos, dos de los cuales en su transcurso se alternaban en el puesto de vanguardia, dándole pasajes de gran emoción que fueron aplaudidas por el público, convirtiendo a esta prueba en la más destacada de la jornada. Con escasa ventaja de 16 segundos, venció la pareja formada por Mario Celli y Marcelino Gómez, sobre la compuesta por Ricardo Vítores y Bruno Spagolla. En tercer lugar llegó el equipo formado por los corredores Humberto Celli y Raimundo Montenegro, abandonado en su transcurso los binomios formados por Antonio Gómez – Alfredo Krebs y Sierra – Santarelli, lo que por su relativa juventud no se encontraba fogueados para este tipo de competencias.
Párrafos de Matthew Henry Jones