Paso cordillerano en la frontera con Chile, por la base sur del monte Tronador, en la provincia de Río Negro, a 41° 13′ de latitud Sur y 71° 51′ de longitud Oeste.
Su importancia geográfica permitía unir totalmente por tierra la región del Nahuel Huapi con Chiloé, evitando cruzar lagos, lagunas y ríos de difícil acceso.
Su nombre aparece como Bariloche, Buriloche y Vuriloche, siendo correcta la última porque la lengua araucana no posee “b”. Francisco Vidal Gormaz lo traduce como “bárbaro que come carne humana”, Fonck dice que sería “el come- jente de atrás” (vuri =espalda, atrás, a escondidas, iloche = bárbaro que come gente humana), en alusión a una tribu que habría habitado al Sur del Tronador y tenía fama de antropófaga, cuyos integrantes unidos a otras tribus, solían asolar Osorno y Chiloé sacrificando a cautivos y comiéndolos. Los españoles les hicieron malocas de represalia. esclavizándolos.
Sobre éstos, escribió Francisco Fonck que: “Faltábanles los recursos del mar, de la caza en las pampas i de la labranza agrícola (…), estaban reducidos a los bosques y campos estériles de la cordillera Alta en que los animales de caza, los pudus i huemules son escasos”.
Según J. Rohde, los naturales llamaban al paso “Furiloche”. Enrique Artayeta niega la antropofagia de los nativos, y amplía su hábitat hasta el cerro Leones, lago Traful y río Limay.
Bertha Ilg de Koessler se adhiere al término mapuche Marilovche: mari = diez, lov = tolderías y che= gente que daría “aborígenes de las diez tolderías”.
Estanislao Zeballos agrega su cuota a una mayor confusión traduciendo “osario de gente, cementerio”.
Al principio, los españoles penetraron por este paso para apresar a los aborígenes comarcanos, luego se olvidó su ubicación y los indígenas de la zona soslayaban las preguntas al respecto, hasta que el jesuita Guillelmo lo redescubrió en 1715, por lo que, temiendo que se reiniciaran las malocas, envenenaron al descubridor del paso y a su sucesor Elguea.
Luego de escarmentar a los españoles se retiraron de la zona, perdiendo nuevamente la ubicación del paso.
Reabre el debate Guillermo Cox en 1859 y F. Moreno señala en 1880 el comienzo argentino del paso. No pudo terminar de explorar por caer cautivo.
Jorge S. Rohde partió el 27/02/1883 del campamento de la 3º Brigada, y el 14/03 se presentó al general Villegas contándole su descubrimiento, Mientras tanto, del lado chileno, tratan de hacer lo mismo Roberto Christie (1883/4) y Emilio Valverde (1884/5), a quien le sucede Oscar Fischer, hasta que el capitán de ingenieros, Arturo Barrios, logra redescubrir el paso. Este chileno partió de Puerto Montt el 23/04/1900 y llegó a San Carlos de Bariloche el 26/05/1900, haciendo el siguiente camino: por el valle del río Cochamó, río Valverde -afluente del rio Blanco, valle superior del río Blanco, base sur del cerro Tronador, fuentes termales, valle Vuriloche del rio Los Cauquenes, río Manso Superior, lago Mascardi, lagos Gutiérrez y Nahuel Huapi.
En enero de 1901, Emilio Frey, a las órdenes de F. Moreno, reconoce la región desde el lado argentino: “Todo el trayecto desde el Ventisquero hasta los baños coincide muy bien con la descripción de Menéndez; (…). Los re nombrados Baños de Vuriloche son unos arroyitos de aguas calientes, situados a poca distancia uno de otro; son tres los de agua caliente, el del medio tendrá mas de 50°C de temperatura, según pude apreciar por el termómetro, las otras dos no son tan calientes. No merecen el nombre de baños, pues no tienen agua suficiente para bañarse”.
1 comentario
alfrdocariaga@gmail.com