Hace un par de meses el decidido embate contra el Ministro del Superior Tribunal Alejandro Panizzi terminó con el desplazamiento del alto Magistrado. La principal acusación se sustentó en los mensajes y posiciones indecorosas, o partidarias, que éste transmitía en las redes sociales a través de sus cuentas.
En los cuestionados mensajes, Panizzi arremetía permanentemente contra el kirchnerismo y, fundamentalmente, contra la expresidente Cristina Fernández de Kirchner. Este posicionamiento, a entender de los cuestionadores, indicaba una parcialidad manifiesta y una postura no apropiada para un Juez que debe mantener el equilibrio mostrando imparcialidad en sus dichos y acciones.
En estos días los sectores más cercanos a la expresidente organizaron, con gran actividad y despliegue, un acto que contaba con la presencia de la escritora Irina Hauser, autora del libro “MUERTA O PRESA” que trata el intento de magnicidio contra la señora de Kirchner.
Uno de los activistas principales en la organización y despliegue de esta presentación fue el Juez Laboral Paulo Konig quien, en sus mensajes, mostró un decidido y claro posicionamiento político.
Estas acciones del Juez Konig serían análogas, pero en sentido contrario, y tan cuestionables como las expresiones que mostró Panizzi al opinar con tanta dureza contra la ex presidenta.