La instrumentación efectiva de un dólar diferencial respecto de la cotización oficial para determinadas exportaciones, que fuera anunciado este miércoles, tiene ciertos condicionamientos a cumplir, y que formarán parte del tercer decreto que emita el Ministerio de Economía en relación al “Programa de Incremento Exportador”.
Sergio Massa avisó que el tercer decreto es “para aquellos que no juegan limpio” entre los exportadores. Dijo que hay un plazo de 180 días para ingresar las divisas de las exportaciones realizadas. “Hay muchos que hacen el esfuerzo y traen las divisas, y eso se ve desdibujado por los que especulan y le hacen trampa al Estado”, reprochó.
Por eso, “para esos 3.700 millones de dólares de empresas argentinas que no han cumplido, habrá un mecanismo de suspensión del CUIT de las empresas y de sus directores; aspiramos a que, aquellos que evadieron su obligación con el Banco Central, se conviertan en personas no hábiles a nivel comercial”, anticipó sobre la sanción que aplicarán.
También, se les suspenderá el acceso al mercado único y libre de cambios (MULC) si, luego de 30 días de sancionado el decreto, no cumplen con la obligación de liquidar a tiempo.
Un especialista en tributación y comercio exterior consultado por PARTE DE PESCA y de fluidos vínculos con la industria pesquera planteó que “hay bastantes empresas del sector que liquidaron debidamente, pero los bancos de origen no informaron al Banco Central la incorporación de divisas en Argentina y están como infractoras, y sujetas a posibles sanciones”, alertó.
La fuente sostiene que “no solo no podrían acceder a este beneficio temporal de un dólar a trescientos pesos, sino suspendidas en el mercado único de cambios o suspendidas como exportadoras. Y no es un problema de las empresas, propiamente dichas, sino de los bancos de origen que se agarran de ciertas normativas del BCRA”, describió sobre una situación que podría desatarse en breve.
“Hay que poner especial atención en lo que diga el tercer decreto que se anunció, porque terminaría siendo un filtro del primer decreto. En ese zarandeo, muy pocos podrían quedar beneficiados”, advirtió al tiempo de concluir el razonamiento citando un adagio que reza “no es que sea pesimista, sino que soy optimista informado”.