domingo, 7 de julio de 2024
Representación de la llegada del tren a la estación Sarmiento

 

La infraestructura del ferrocarril de Sarmiento consistía en una amplia estación de chapa, un galpón de chapa con capacidad para albergar tres locomotoras, otro galpón de 235 metros cuadrados, un tanque de agua con capacidad para 45 metros cúbicos, un tanque para petróleo almacenaba 45 toneladas o 41.6 metros cúbicos, un puente giratorio de 22 metros de diámetro, un almacén, 3000 metros cuadrados para bovinos, 714 metros de vías destinadas para apartadero, 2373 de vías destinas para desvíos y viviendas para el personal.

Vida social

“El autovía llevaba 50 personas cómodamente sentadas, iban tres por asiento, además estaba el reservado con 12 asientos más y si era necesario llevaba gente parada en la carga.

El ferrocarril traía  a los clubes de futbol a jugar desde Comodoro; toda visita importante llegaba por el ferrocarril. Cuando se inauguró la guarnición militar, todaa las formalidades que debían cumplirse se realizaban en la estación; se preparaba la formación, la banda de música; cuando se recibía o se despedía una autoridad militar había que guardar el reservado del coche motor; era todo un acontecimiento cada vez que llegaba o salía un personaje.

De las misma manera, cuando venían visitas religiosas como un obispo, un personaje significativo para la comunidad.

Al día siguiente de un casamiento, la gente iba a la estación a despedir a los novios porque sí o sí partían de ahí.

Todos los días llegaba la policía a cuidar el orden, el camioncito del correo, los productores.

Viajaban militares, sacerdotes, prostitutas, gente de familia; toda la comunidad pasaba por la estación del ferrocarril. Era la conexión con el mundo.

La fiesta

Cuanta Carolli Williams “mi viejo tocaba el bandoneón, la guitarra y cantaba. En una oportunidad -en invierno- hicieron una fiesta, taparon con frazadas todas las ventanas porque se estaba instalando un regimiento, usaron todas las instalaciones del ferrocarril. Todo lo que era el hall de entrada era la sala de baile, donde estaban las habitaciones de los maquinistas era el espacio para atender a las ancianas y las mamás que iban acompañando a las chicas, la boletería era el bufet donde se despachaban las encomiendas estaban los músicos, así que fue una fiesta terrible; invitaron a todas las chicas del pueblo, además había un colectivo que iba a buscar a la gente al Club Deportivo. A mi viejo estas fiestas luego le costaron el traslado”.

Texto del libro “Aventuras Sobre Rieles Patagónicos”, de Alejandro Aguado.

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