Mariano Arciono, que se encuentra de paseo por los Estados Unidos, está pensando en su próximo destino de vacaciones para después del 10 de diciembre, demostrando que poco y nada le importan los enormes problemas que atraviesa la provincia, como la falta de agua en el sur o la Capital, los pésimos servicios en la comarca Andina, la falta de trabajo en la meseta o la inseguridad en el valle, por citar algunos ejemplos.
El gobernador, que seguramente sea el que más vacaciones tomó durante un mandato, ya avisó a Legislatura que estará ausente de la provincia desde el 25 de diciembre próximo al 10 de enero de 2024.
“Tengo el agrado de dirigirme a la Legislatura, en el marco de lo prescrito por el Art. 154 de la Constitución Provincial, a los fines de por en su conocimiento y solicitar la correspondiente autorización para ausentarme de la Provincia entre los días 25 de diciembre del corriente año y 10 de enero de 2024, por razones personales”, expresa la nota enviada el 27 de noviembre.
Claramente a Arcioni no le importa el estado en que deja la provincia, con las cuentas en rojo y los chubutenses que no lleguen a fin de mes, al parecer su única preocupación es tener todo en regla para viajar y disfrutar de un merecido descanso al algún lugar lejano y paradisíaco del planeta.
La población, por su parte, seguramente también estará alegre y deseará que permanezca siempre lejos de la provincia y sus intereses, disfrutando de las “grandes cosechas obtenidas”. Esté donde esté, vaya donde vaya, en el imaginario colectivo será recordado como el peor gobernador de la historia de la provincia.