El primer cine que comenzó a funcionar en Esquel es, según algunas versiones, el Maitena, en “La Maragata”. Más tarde, el señor Claudio Carro dio cine en el local donde hoy está instalada la Casa Criado Lirio. Al quemarse el edificio, se continuó dando cine en el Salón del Ideal.
Años después, el señor Méndez construyó el Salón Armonía, que se constituyó por derecho propio en la Sala Preferida de la Población. El señor José Méndez y sus hijos vinieron a ser así verdaderos propulsores del progreso de Esquel en la faz cultural.
La Sala de la Armonía pasó después a la empresa “Coliseo”, que la explota en la actualidad y es el único cine de Esquel.
El Coliseo ha podido desarrollar aquí una interesante labor en lo que a cinematográfico se refiere, gracias a la inteligente y activa intervención de su gerente en esta, señor Daniel Delgado, quien no solo dirige la faz económica, sino que incursiona en el campo artístico apoyando la idea útil y de beneficios colectivos.
El señor Delgado ha sido presidente del Patronato de Menores de Esquel en un periodo muy difícil, pero durante el cual no desmayó, consiguiendo su labor y las gestiones necesarias para que la niñez desamparada tenga su casa propia.