Con los distintos nombres de San Antonio La Oliveyra, SA La Oliveira, o SA de Oliveira, esta embarcación era una sumaca de 136 t de porte y 10 pies de calado, mandada por el primer piloto de la armada, Manuel Bruñel, como integrante de la flota que al mando de Juan de la Piedra llevaba el objetivo de colonizar en la Patagonia. En esta nave iban 4 oficiales de mar y 25 hombres de tropa, y estaba acompañada por el paquebote Santa Teresa, el bergantín-goleta Nuestra Señora del Carmen y la fragata particular Nuestra Señora del Carmen.
Al llegar al Golfo San José -península Valdés-, se ocupa a la sumaca en buscar diversos fondeaderos e ir tras el hallazgo de agua dulce, de la que carecían en grado sumo en el verano de 1778/9.
Otra actividad que se le encomienda la lleva hasta lo que creyeron que era la boca del río Colorado, pero que en realidad era la desembocadura del río Negro (primero) y Colorado (después), al que llamaban Sauce. Regresaron de allí a puerto San José, el 3 de febrero de 1779.
Luego de las engorrosas tramitaciones realizadas previamente en Buenos Aires y Montevideo durante el armado de la expedición el año anterior (que habían demostrado el poco interés por parte de las autoridades virreinales en la empresa encomendada a Juan De la Piedra por parte del mismo rey de España), el 16/04/1779 zarpaba nuevamente esta nave acompañada por el bergantín Nuestra Señora del Carmen, conduciendo a la gente con la que el superintendente Francisco de Viedma fundaría una colonia a pocos kilómetros de la boca del río Negro (hoy ciudad de Viedma).